¿Cómo reconocer los alimentos orgánicos?: La guía que nadie te ha mostrado
Alimentos Orgánicos: ¿Por Qué Elegirlos?
Más allá de imponer un tipo específico de alimentos saludables o clasificarlos como buenos o malos, queremos acompañarte en el camino hacia un estilo de vida con-ciencia. Hoy te presentamos una categoría que ha ganado popularidad en mercados y hogares: los alimentos orgánicos. Te damos las claves para identificarlos, entendiendo el impacto de las prácticas que, como comunidad, estamos promoviendo para crear hábitos más conscientes y que, al final, te permitirán tomar decisiones Savvyas.
Cada año surge una nueva dieta y, con ella, el alimento "ideal" y un nuevo "enemigo público" en la alimentación. Sin embargo, los alimentos orgánicos han logrado trascender la moda, ya que se habla de ellos desde hace más de una década. Su popularidad ha crecido no solo como una tendencia “fit” sino como un movimiento en pro de la salud, la tierra y el respeto por las tradiciones ancestrales. Pero, ¿cuáles son las ventajas de consumir alimentos orgánicos y cómo puedes reconocer un alimento orgánico realmente? Aunque los beneficios son múltiples, es importante entender sus particularidades para tomar una decisión informada.
La Importancia de una Alimentación Consciente
El mundo de los alimentos orgánicos ha despertado tanto interés como dudas y mitos. Así como han ganado popularidad, también han surgido confusiones sobre si son mejores o peores que otros alimentos. Al igual que con dietas como la paleo, la keto o el veganismo, la idea no es pensar en extremos, sino entender su valor dentro de una alimentación consciente que pueda mejorar nuestra salud.
Nuestro director científico, el Dr. Carlos Jaramillo, explica que “la alimentación es algo de lo que debemos hacernos dueños; solo así podremos entenderla a la luz de la ciencia y la medicina, vivirla y disfrutarla.” Con esta guía, queremos darte herramientas para comprender qué son realmente los alimentos orgánicos y cómo pueden ayudarte a tomar decisiones pensando en tu bienestar y el respeto al medio ambiente.
El Trinomio Orgánico Perfecto: Tres Factores Clave
El Dr. Jaramillo propone tres principios básicos para reconocer un buen alimento, sin dejarnos llevar solo por las modas o etiquetas:
Que haya estado vivo
Ya sea una fruta, una verdura o un alimento de origen animal, los alimentos orgánicos conservan una conexión directa con la tierra y la naturaleza. Por otro lado, los ultraprocesados nunca estuvieron vivos, lo que significa que no contienen la misma vitalidad natural.
Qué comió o cómo fue fertilizado
Es importante conocer el tipo de alimentación de cualquier alimento que consumimos. "De lo que él come, de eso está hecho y de eso también empezarás a estar hecho tú", asegura el Dr. Jaramillo. Los productos con transgénicos, pesticidas o fertilizantes químicos pueden afectar tu salud a largo plazo.
Nivel de procesamiento
Los alimentos con el menor procesamiento posible mantienen mejor sus nutrientes. Así, especias secadas al aire o frutas frescas mantienen su esencia, mientras que los productos ultraprocesados tienden a perder beneficios. Siempre que puedas, elige alimentos de procesamiento mínimo para mejorar tu bienestar.
¿Cuáles son los alimentos orgánicos?
Siguiendo estos tres pasos, podemos identificar mejor los alimentos orgánicos cuando vamos al mercado, a la tienda local o incluso al supermercado. Este tipo de alimentos no es solo una etiqueta: son productos cultivados sin pesticidas ni químicos agresivos, y se conectan directamente con prácticas sostenibles de agricultura orgánica. Elegirlos es una forma de contribuir al bienestar del suelo, la biodiversidad y nuestra salud.
Guía Práctica para Elegir Alimentos Orgánicos
Orígenes y CertificaciónLos alimentos orgánicos siguen un proceso de certificación que varía según el país, garantizando métodos de cultivo y manejo del suelo más limpios. Es clave conocer el origen de estos alimentos y asegurarse de que cumplan con los estándares de certificación de cada lugar.
Prefiere alimentos en proceso de liberación de químicos
En Latinoamérica, muchos terrenos aún están en proceso de eliminación de pesticidas y fertilizantes. Por ello, en algunos casos, los alimentos se consideran en “proceso de conversión orgánica”: están en el camino, aunque aún no son completamente libres de químicos.
Un aspecto clave de la agricultura orgánica es el control natural de plagas. Muchos agricultores prefieren plaguicidas biodegradables y naturales, como mezclas de ajo y neem, o incluso insectos beneficiosos, en lugar de productos químicos. Esto da lugar a alimentos más limpios y saludables.
Revisa el manejo de riego
Algunos cultivos orgánicos se riegan con agua de lluvia o de arroyos locales, pero debido a la contaminación ambiental, el agua de riego en muchas zonas puede necesitar tratamiento. Para asegurar la calidad orgánica, se recomienda que el agua de riego pase por filtros de carbono que reduzcan los contaminantes.
Alimentos en Conversión Orgánica en Latinoamérica
En muchos países, la disponibilidad de productos 100% orgánicos es limitada. Sin embargo, los productos en proceso de conversión orgánica o que cumplen con prácticas de cultivo sostenibles están avanzando hacia un estándar de calidad más alto.
Los productos de origen animal etiquetados como orgánicos provienen de animales que son criados sin antibióticos, hormonas o purinas. Asegúrate de que los animales se alimentan con fuentes naturales y viven en condiciones que respetan su bienestar.
El empaque suele ser mínimo o biodegradable
Los alimentos orgánicos suelen evitar los empaques de plástico o con componentes no biodegradables. Las opciones más ecológicas incluyen hojas de mazorca, bolsas de papel o empaques compostables. Si el empaque no parece respetuoso con el medio ambiente, el producto puede no ser tan orgánico como parece.
Abono natural
Los alimentos orgánicos son fertilizados con compuestos naturales. Muchos agricultores practican la agricultura regenerativa, usando abonos que permiten a los nutrientes volver a la tierra. Revisa si el productor emplea abonos naturales que respetan la calidad del suelo y el ciclo de vida del alimento.
Para reducir la huella de carbono, muchos alimentos orgánicos se distribuyen localmente o en mercados cercanos, y se transportan con medios menos contaminantes. En ciudades, puedes encontrar mercados de fin de semana donde los agricultores venden directamente a los consumidores, reduciendo la necesidad de transporte a largas distancias.
Costo
El precio de los alimentos orgánicos suele ser más alto debido a los métodos de cultivo, el tipo de abono y el cuidado de los cultivos. Este costo refleja el esfuerzo por evitar pesticidas, fertilizantes químicos y empaques de un solo uso. Aunque el costo es mayor, los beneficios para tu salud y el medio ambiente lo compensan.
Al ser más naturales, los alimentos orgánicos requieren ciertos cuidados en casa. Lava tus frutas y verduras con soluciones suaves de agua y vinagre o bicarbonato, y guarda las carnes en el congelador para mantenerlas frescas. También puedes aprovechar métodos de conservación como el secado o la fermentación para prolongar su frescura y reducir el desperdicio.
Aprende sobre su ciclo de vida
Un alimento orgánico completo busca el cierre del ciclo, lo que implica una mínima generación de residuos. Aprovecha los restos para hacer compost o dónalos a granjas locales. Así, contribuyes al ciclo de vida de la agricultura orgánica, devolviendo nutrientes al suelo.
¿Cuáles son las ventajas de consumir alimentos orgánicos?
Consumir alimentos orgánicos presenta varias ventajas científicas y ambientales importantes. Desde una perspectiva de salud, estos alimentos reducen la exposición a pesticidas y fertilizantes sintéticos, los cuales han sido vinculados en estudios a efectos adversos en el sistema nervioso y a un mayor riesgo de padecer enfermedades crónicas a largo plazo. La agricultura orgánica, al emplear métodos naturales de fertilización y control de plagas, preserva la calidad de los alimentos, lo que permite que mantengan un perfil de nutrientes más alto, especialmente en antioxidantes y fitonutrientes, en comparación con los alimentos cultivados de manera convencional. Estos nutrientes desempeñan un papel fundamental en la reducción del estrés oxidativo en el cuerpo, un proceso relacionado con el envejecimiento celular y el desarrollo de ciertas enfermedades.
Desde el punto de vista medioambiental, la agricultura orgánica tiene una huella ecológica menor. Al evitar el uso de pesticidas y fertilizantes químicos, este tipo de agricultura ayuda a proteger la biodiversidad y a conservar la salud del suelo, esencial para la sostenibilidad a largo plazo. La agricultura orgánica también contribuye a la reducción de la contaminación del agua y del suelo, ya que los productos químicos que se emplean en la agricultura convencional suelen terminar filtrándose en los cuerpos de agua cercanos. Además, la agricultura orgánica promueve prácticas éticas, apoyando a pequeños agricultores y a comunidades locales que siguen métodos sostenibles, lo cual beneficia tanto a las personas como al planeta.
En términos de sabor y calidad, los alimentos orgánicos suelen ser menos procesados y más frescos, lo que preserva sus sabores naturales e intensos. Esto se debe a que la menor manipulación y la ausencia de aditivos y conservantes permiten que los alimentos retengan su esencia natural, algo que estudios de percepción han confirmado en consumidores.
¿Cómo se reconocen los alimentos orgánicos?
Identificar un alimento orgánico puede lograrse con algunas claves importantes y conocimientos básicos sobre su procedencia. Para empezar, en frutas y verduras, existen etiquetas que pueden ayudar: los stickers que contienen un número que empieza con "9" en el código de PLU (Price Look-Up) generalmente indican que el producto es orgánico y ha sido cultivado siguiendo normas específicas de agricultura sin pesticidas ni fertilizantes sintéticos. En ciertos países, los organismos reguladores también otorgan certificados de producción orgánica que aparecen en las etiquetas. Sin embargo, para aquellos productos que no tienen etiquetas, como los comprados en mercados locales o directamente de productores, es útil indagar sobre el manejo de los cultivos y la alimentación de los animales en el caso de productos de origen animal.
Identificar un alimento orgánico puede lograrse con algunas claves importantes y conocimientos básicos sobre su procedencia. Para empezar, en frutas y verduras, existen etiquetas que pueden ayudar: los stickers que contienen un número que empieza con "9" en el código de PLU (Price Look-Up) generalmente indican que el producto es orgánico y ha sido cultivado siguiendo normas específicas de agricultura sin pesticidas ni fertilizantes sintéticos. En ciertos países, los organismos reguladores también otorgan certificados de producción orgánica que aparecen en las etiquetas. Sin embargo, para aquellos productos que no tienen etiquetas, como los comprados en mercados locales o directamente de productores, es útil indagar sobre el manejo de los cultivos y la alimentación de los animales en el caso de productos de origen animal.
Para los productos de origen vegetal, como los granos y las verduras, los alimentos orgánicos suelen estar cultivados en suelos enriquecidos con abonos naturales, lo cual también contribuye a un ciclo más sustentable y natural de cultivo. La agricultura orgánica promueve la rotación de cultivos y el uso de compost en lugar de fertilizantes sintéticos, lo que ayuda a mantener la salud del suelo y evita el agotamiento de nutrientes.
Además, investigar sobre el productor o la marca puede dar una mayor garantía de calidad orgánica, ya que algunas marcas trabajan con cadenas de suministro transparentes, donde se muestra desde el proceso de cultivo hasta el empaque final.
Así que, al elegir alimentos orgánicos y adoptar prácticas conscientes en tu día a día, no solo estás cuidando tu salud, sino también promoviendo una conexión respetuosa con la naturaleza. Con cada elección Savvya, fortaleces el equilibrio entre bienestar personal y sostenibilidad, cultivando un estilo de vida en armonía con el planeta.